La reparación del camino comenzó en las inmediaciones de los esteros del Río Santa Lucía, pasando por la Escuela Nº 883, que lleva el nombre de su ex director “Orosmán Moratorio” y finaliza en su intersección con la Ruta Nacional Nº 118. Transitando por el lugar los habitantes del paraje se aproximaron a manifestar su beneplácito por los trabajos que se realizan, ya que “este es un viejo reclamo nuestro de más de 20 años que estábamos abandonados”, señalaron.

La obra consiste en un trabajo integral, puesto que “antes a veces nos mandaban alguna máquina que tapaba algunos pozos, los más profundos y nada más, de lo contrario nosotros con ayuda de nuestras familias, hacíamos unas taipas en los costados del camino y desagotábamos con baldes y luego esperábamos otra vez un par de días para que seque el barro y así poder pasar con nuestros vehículos y se nos complicaba cuando se enfermaba algún chico o teníamos alguna emergencia”, indicaron.

Para corroborar lo que decían y ante la aparente cara de incredulidad que presentaban los que escuchábamos los relatos, una chica mostró una filmación hecha con un celular de los trabajos que debían realizar antes de tratar de salir con sus vehículos hacia Saladas. Tanto es la valoración de las tareas realizadas por Obras Públicas de la Comuna, que piden un cartel indicador que advierta sobre la intransitabilidad por el camino, para preservarlo y prolongar vida útil y no tener que recurrir a cada rato para que lo reparen nuevamente.

Es lógico que una vez concluido el trabajo, sólo restará un mantenimiento para preservar el camino, que requirió hasta el momento la participación de herramientas pesadas, entre las que se cuentan, camiones, retroexcavadora, rastra de discos, motoniveladora de arrastre, tractores y la cuadrilla de operarios con un trabajo y esfuerzo destacable, destacaron tanto vecinos como Darío Danuzo, quien agregó que “primero se liberó la parte intransitable en la zona entre lagunas y cañadas, se destaparon alcantarillas y se entubaron otros lugares muy bajos”.

El resto del camino fue primeramente disqueado, luego perfilado, abovedado y cuneteado, dijo Danuzo, agregando que “después de estas últimas lluvias, van a haber algunos hundimientos en las zonas más bajas que fueron objeto de relleno, lo que en días más vamos a corregir y consolidar y una vez finalizada nuestra tarea en Anguá, nos dirigiremos a cumplir funciones en beneficio de otros barrios y parajes de Saladas, en el marco de la gestión del Intendente Omar Herrero”, indicó finalmente el funcionario.