“Fue como una tapa que se cerró y otra que se abrió. Apareció el newcom justo cuando lo necesitaba. Cuando uno deja el deporte y ya tiene unos años encima, cuesta encontrar algo que te motive, y esto llegó para llenar ese vacío”, expresó Cóceres en su visita a Santa Rosa, donde participó de un nuevo encuentro de esta disciplina adaptada para adultos mayores.


Con once años de experiencia en el newcom, asegura que las emociones siguen tan vivas como en sus tiempos de básquet: “Sigo sufriendo, trabajando y jugando con la misma intensidad que cuando empecé. Esta actividad no tiene edad. Nos da salud, nos conecta con otros y nos permite seguir compitiendo”.


El equipo que integra nació de un grupo de amigos que querían formar algo distinto. “Hace un año y medio empezamos a entrenar, y a los cuatro meses ya estábamos en nuestra segunda liga. Hoy somos casi 40 personas. No todos pueden jugar, pero igual acompañan. Eso habla de un grupo unido y apasionado”, contó.


Pacho destaca también el crecimiento del newcom en toda la provincia: “Esto empezó con pocas localidades como Capital, Caá Catí e Itaibaté, y ahora ya se juega en muchos pueblos. Hay un contagio positivo. Además, gracias al apoyo del Gobierno y los municipios, se construyeron muchos estadios cerrados que ayudan no solo al newcom, sino a todos los deportes”.


Para Cóceres, el newcom no solo le permitió mantenerse activo, sino que también dio una nueva oportunidad a muchas personas que nunca habían practicado deportes. “Hoy hay colonias, barrios y localidades donde adultos mayores que nunca jugaron nada, ahora forman parte de un equipo y disfrutan como nunca”, señaló emocionado.


Con una carrera llena de logros y una humildad intacta, Pacho Cóceres cierra con un mensaje claro: “El deporte no tiene fecha de vencimiento. Mientras haya ganas, hay juego. Y el newcom vino para quedarse”.